El daño de la rumorología tecnológicaEscrito por Redacción TNI el 03/07/2009 a las 14:49:501850
Cualquier palabra con el sufijo –logía indica ciencia o discurso o doctrina de la parte previa. No existen estudios formales, que conozcamos, pero sin embargo hay artistas de esa ciencia en el caso del rumor. Unos dirán lanzar globos sonda y otros “calumnia que algo queda”. El arte consiste en que todos sean, seamos, manipulados y difundamos el rumor sin apenas darnos cuenta. Si se consigue esto y se esparce ampliamente parece que la cosa es cierta e inminente. Esto pasa muy a menudo en Internet o con los mensajes cortos ya que es muy fácil copiar y replicar mensajes. ¿Cuántos mensajes hemos dejado de abrir porque hemos oído que bloqueaban los ordenadores? Luego claro, la coletilla de ¡pásalo!. Encima si no lo hacías, te sentías un antisocial. Pues bien, dicho esto, hace pocos días circulaba un rumor a través de SMS (mensajes cortos de teléfono) indicando que una Caja de Ahorros el viernes Santo iba a declararse insolvente o iba a ser intervenida por el Gobierno. Era un rumor “solvente”: un día festivo, pocos días antes se había hecho lo mismo con la Caja Castilla la Mancha, cambio de Ministro de Economía, otros cambios en Cataluña y rumores previos insistentes en la misma línea… Estaba cantado. Pasó el viernes, el sábado, el domingo y nada. En la misma dirección ya había aparecido el 28 de octubre del 2008 una noticia en “El Economista” indicando que el director general de la Caixa Juan María Nin había enviado una carta a los responsable de su red comercial territorial para que “eviten descalificaciones a otras entidades”. La carta había surgido por la queja de la Federación Valenciana de Cajas de ahorro que denunciaba competencia desleal por parte de algunas entidades. Cuando se envía una carta a los ocho directores generales, se nos antoja difícil, que haya surgido espontáneamente y que no sea orquestado. Si tan disgustado estoy con el comportamiento de “todos” los responsables, destituyo alguno y gano credibilidad, de lo contrario estoy dando la razón a los que me señalan. Ciertamente el personal de cajas más pequeñas están hartos de que sus clientes saquen sus ahorros porque han oído rumores provenientes de otras cajas. ¡Qué bajo que ha caído la ética comercial! Desde luego a nadie se le ocurriría enviar cartas (las de siempre) anónimas masivas para orquestar una campaña así, primero por su coste y segundo porque difícilmente podría ser anónima. Como decía Vinton Cerf en Madrid, los gobiernos se han de poner de acuerdo para evitar los abusos de la red, y este, la rumorología, es uno y grave. </p> |