El lío del puntcatEscrito por Tecnonews el 23/06/2015 a las 17:29:483891
Es frecuente escuchar decir que gracias a internet el periodismo se ha revolucionado. Sin que esa afirmación deje de ser cierta, es también cierto que quizás esa revolución no es todo lo positiva que muchos esperamos.
La siguiente editorial surge tras la reacción que suscitó una noticia indexada por Tecnonews en Menéame hace algunas semanas. En dicha noticia se explicaba cómo había surgido el dominio web .cat y cómo este ya llevaba 9 años en vigor. Resulta sorprendente como bajó el karma (las opiniones negativas en la página en cuestión) de nuestro perfil en la plataforma social, gracias o por culpa de esa noticia. 13 comentarios en nuestra contra por hacer mención al domino web de Catalunya. 13 comentarios críticos e insultantes.
Ciertamente las NNTT han conseguido que la información se convierta en algo abierto y social sin embargo, resulta muy negativo que la calidad de la información esté, como en casos como Menéame, sujeta a las filias y fobias ideológicas de los lectores. No conseguimos entender el treceavo comentario que terminó por destrozar nuestro Karma, que afirmaba lo siguiente: “El .cat fue un dominio dado siguiendo criterios étnicos. Me parece tan repugnante como que alguien propusiera el .git para gitanos.”
Más allá de ser un comentario absolutamente racista, es un comentario que no tiene ningún rigor. Según la libre interpretación del anónimo usuario, serían igualmente étnicos el .bcn, el .eu o el .gal.
Lo más increíble, sin embargo, es el hecho de que nuestra posición como informadores se vea afectada por publicar una noticia en la que la política está muy lejos. En nuestro caso se trataba de informar sobre el .cat y sus 9 años de vida. Los detractores podrán afirmar que no es cómo lo explicamos sino el qué. Dirán incluso que la selección de la información ya es política, añadirán que es perder el tiempo hablar de algo residual y minoritario como el .cat, pese a todo nadie dice lo mismo cuando se trata el .xxx o el. Edu.
En resumidas cuentas, los medios colaborativos están muy bien pero son un campo libre para la descalificación y el insulto y son, además, muy proclives a la desinformación. |