Netflix inició su andadura en 1997 como un servicio de alquiler de películas en DVD por correo (tradicional, no electrónico, naturalmente), para dar el paso al streaming en 2007. De hecho, hace poco que la compañía envió su último DVD de alquiler por correo.
Desde que realizara dicha transición y, sobre todo, durante los primeros años, decir Netflix equivalía a hablar de streaming de películas y series, lo que facilitó que la empresa creara su propia productora y sus contenidos exclusivos. Pero un mercado que, con el tiempo y la creciente penetración de la banda ancha, se ha demostrado tan atractivo, no podía dejar de generar competencia.
Y así ha sido como, además de la todopoderosa Amazon con Prime Video (lanzado en 2006, pero bajo una fórmula distinta que ha ido evolucionando para parecerse a Netflix y competir con esta), han surgido en el mercado otros contrincantes que han empezado a disputarle un pedazo de este pastel: Rakuten TV (2010), Disney+ (2019), Apple TV (2019), o HBO Max (2020) entre otros.
La aparición de mayor competencia en un mercado en constante incremento no ha sido óbice para que los nuevos competidores le hayan robado cuota de mercado a Netflix y, así, hemos llegado a la situación que describe Next TV: probablemente por primera vez desde 2007, la audiencia de Netflix ha empezado a consumir menos horas de contenido en el servicio, con lo que la tendencia de consumo de lo que llevamos de 2023 se encuentra por debajo de la del 2022 en términos de horas de visualización.
Para realizar dicha afirmación, Next TV se ha basado en los datos de visualizaciones que publica la propia Netflix, constatando un descenso apreciable en las horas que los usuarios pasan ante la pantalla viendo los contenidos de la plataforma.
La misma publicación explica que los éxitos de Netflix han sido, valga la paradoja, menos exitosos que en otros años; utilizando el "Top 10 Global" semanal de Netflix, un ranking de las series y películas líderes en la plataforma, Next TV descubrió que entre enero y mayo de este año incluídos, el tiempo de visualización global ha caído en 330 millones de horas, lo que supone un descenso del 4% en comparación con el año pasado.
Solamente la serie de intriga The Night Agent ha generado para la productora de Netflix más de 200 millones de horas de visualización en una sola semana en el medidor del Top 10 Global en más de 90 países. Y eso solo sucedió durante una semana, cuando generó casi 216,4 millones de horas del 27 de marzo al 2 de abril, el total semanal más alto para cualquier programa medido por el Top 10 Global hasta ahora este año.
En comparación, durante la primera semana de junio del año pasado, Netflix tuvo dos programas que superaron la marca de las 200 millones de horas transmitidas: la segunda temporada de Los Bridgerton, y la cuarta temporada de Stranger Things, la cual consiguió batir la meta de los 200 millones de horas en dos ocasiones en el lapso de cinco meses, generando más de 335 millones de horas de visualización para la última semana de mayo de 2022.
Netflix no ha querido comentar las cifras con Next TV, según informa la misma publicación.
No obstante, no todo son malas noticias, y según otra fuente consultada por Next TV, Netflix tiene actualmente un 8% de todo el mercado televisivo estadounidense en horas de visualización, lo que supone un notable incremento desde el 5,8% del año pasado.
Y el número de suscriptores del servicio también ha aumentado en once millones más en el último año desde marzo de 2022 al mismo mes de este año.
Para el presente año, al servicio de streaming todavía le quedan un par de ases en la manga, como la cuarta temporada de The Witcher y la segunda de The Lincoln Lawyer, que podrían elevar sus audiencias.
Y tampoco parece haber miedo entre los inversores, ya que las acciones de la compañía matriz han subido un 25% desde enero de este año en el Nasdaq.