Invertir poco y ganar mucho haciéndonos ricos en el proceso, no es solamente el sueño de todo inversor, sinó que me atrevo a decir que el de casi todos los seres humanos. Y Jackson Greathouse Fall ha llevado a cabo un interesante experimento al respecto con ChatGPT con GPT-4: probar si la inteligencia artificial de moda es capaz de darnos consejos financieros para lograr el objetivo antes comentado, o un atisbo de este.
Pero, antes de nada, ¿quién es Jackson Greathouse Fall? Tal y como podemos leer en su LinkedIn, es un diseñador web, de branding, y de producto, al que le gusta trabajar sobre todo con startups, además de ser él mismo un emprendedor con experiencia, por ejemplo, en el campo de los Bitcoins.
El secreto está en el prompt
Tal y como Greathouse explica en el hilo de Twitter en el cual ha detallado el experimento, empezó con un prompt indicándole a ChatGPT que tomara el rol de una inteligencia artificial emprendedora. Los resultados que ofrece este chatbot acostumbran a ser mejores si se le pide que adopte un rol determinado, una técnica que es un secreto a voces entre quienes se dedican a la “ingeniería de prompts”. También le indicó que él mismo, Jackson, actuaría como ejecutor de las acciones de ChatGPT en el mundo real, y que tenía un presupuesto de 100 dólares para maximizar el beneficio en el menor tiempo posible, pero sin llevar a cabo nada ilegal, ni realizar trabajo manual.
La respuesta de ChatGPT fue detallada y explicada por pasos: primero, Jackson tenía que comprar un dominio y contratar un hosting barato para, a continuación, crear un sitio de nicho con contenido para vender gadgets de cocina, cosas para animales de compañía, o productos ecológicos mediante programas de afiliación; en tercer lugar, debía compartir artículos y reviews en las redes sociales y comunidades online sobre el mercado de nicho que hubiera elegido, e interactuar con los demás internautas para crear comunidad. Finalmente, ChatGPT le mandó a Jackson trabajar el SEO de su sitio web para optimizar su posicionamiento en buscadores, y volver a él para seguir con el plan.
El sitio creado se puede ver GreenGadgetGuru, ya que Greathouse siguió el plan al pie de la letra, e incluso solicitó al chatbot un prompt para que Dall·E le generara un logotipo, y las instrucciones para crear el sitio web.
Tras un día de funcionamiento del sitio, Jackson recibió una inversión de 100 dólares que, a su vez, pudo reinvertir en campañas de promoción en redes sociales, pero -y atención al dato- todavía sin haber vendido nada. De esta forma, y mediante inversiones que han llegado en paquetes de hasta 500 dólares, Greathouse ha conseguido llegar a manejar una startup que ha valorado en 25.000 dólares a partir de las inversiones recibidas.
Pese a que no ha explicitado por qué vía le han llegado dichas inversiones, de su hilo de Twitter se puede desprender que ha sido a través de mensajes directos en la misma red social en la que ha expuesto su experimento.
Obviamente, todas estas cifras han sido anunciadas por el joven creador en su cuenta de Twitter, y ni desde Business Insider han podido verificarlas de forma independiente, así que deberemos confiar en su palabra.
