Cinco aspectos clave a la hora de implementar la cultura del bienestar en una empresaEscrito por Vanessa Rodriguez el 05/05/2020 a las 13:51:031968
Conseguir el bienestar es clave no solo para que la productividad aumente, sino también para que el empleado se encuentre a gusto en su trabajo, se implique con la compañía y sea su mejor embajador de marca.
Esto, en un entorno como la pandemia por coronavirus que se extiende por todo el mundo y que amenaza la supervivencia de grandes empresas, pymes y profesionales, se torna clave y es que implantar la cultura del bienestar de forma transversal es el principal catalizador para poder seguir cosechando resultados.
El nuevo liderazgo personal y profesional pasa porque las personas gestoras y directoras sean promotoras de la salud propia y del resto de su equipo. “El interés sobre cómo crear una cultura del bienestar está en auge. La clave para entender el concepto es comprender que la salud es un recurso para la vida, no un objetivo en sí. No debemos ver la salud cómo un índice de bienestar, sino la salud cómo una herramienta para llegar al bienestar”, explica Estel Mallorquí, directora y fundadora de Biwel.
El primer paso para crear una cultura del bienestar dentro de una empresa pasa por educar, empoderar y acompañar a las personas en la conquista de estilos de vida que generen salud y bienestar en sus comunidades personales y profesionales. En este sentido, los estilos de vida se nutren del entorno social, de una visión del mundo que implica un conjunto de patrones de conducta, de valores y creencias que nos ayudan a asumir un determinado rol en el aspecto social.
“En una cultura del bienestar, las influencias sociales pueden conducir a las personas a tener un comportamiento saludable, o no, en cada uno de los hábitos de salud: actividad física, alimentación, gestión emocional, hábitos tóxicos, descanso, salud general o educación financiera”, añade la directora de Biwel.
En este sentido, desde Biwel revisan estas influencias sociales y señalan cómo se pueden tener en cuenta a la hora de diseñar un plan de bienestar empresarial:
“Crear una cultura del bienestar requiere tiempo, esfuerzo, estar abierto al feedback constructivo de los empleados y construir una metodología de mejora continua año tras año. Cada uno de los programas de salud y bienestar implementados es importante que esté alineado con todos los aspectos de la cultura de la empresa, que sea coherente y crezca año a año con el cambio cultural”, señala Estel Mallorquí.
El capital humano es el principal activo de la empresa, responsable de su crecimiento, y debemos cuidarlo creando empresas más saludables, seguras, productivas, humanas, competitivas y sostenibles. Personas más comprometidas, felices y saludables generan empresas saludables y rentables.
Durante esta situación de COVID19 es el momento de plantear una gestión post-confinamiento coherente con nuestra cultura y con la seguridad y salud de nuestros empleados. Digitalizar la salud puede ayudar a obtener información veraz importante para una gestión empresarial más eficaz. |