El Centro Nacional de Seguridad Cibernética (NCSC) del Reino Unido y la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE. UU. han anunciado que el grupo de ciberdelicuentes rusos denominados Turla ha pirateado al grupo de hackers iraní OilRig para espiar a diversos países. De hecho, los informes señalan que se han descubierto ataques a cerca de 35 países, principalmente de Oriente Medio.
Ante este hecho, Albert Barnwell, Sales Manager – Spain & Portugal de CiberArk, ha afirmado: “Sería una ingenuidad pensar que los atacantes no intentarán nuevos métodos para evitar ser detectados y conseguir sus objetivos. Los atacantes revisan y evalúan constantemente la forma en que nos protegemos, así como la forma en que respondemos a las amenazas. Estos ya saben cuáles son las medidas que toman las organizaciones para paliar los efectos de un ataque, y han intentado desviar la atención para protegerse dirigiendo su ataque a otro estado nación, lo cual ha acarreado implicaciones políticas. Esta situación reafirma que debemos pensar como atacantes. Nuestras técnicas defensivas deben evolucionar constantemente para garantizar que los controles de seguridad básicos estén funcionando correctamente”.