Una contradicción explica la situación de una de las industrias más importantes del sector de las NNTT en España hoy en día.
Los videojuegos son fundamentales para entender el consumo de recreo del país. España se sitúa en la quinta posición europea del consumo de videojuegos por detrás de Reino Unido, Alemania, Francia e Italia. La pregunta surge cuando descubrimos que su industria ocupa el puesto número cinco. ¿Cómo puede ser que se consuma mucho pero los beneficios para la industria sean pocos? ¿La mano de obra? ¿Precios más reducidos? La respuesta está en boca de todos: la piratería que produce situaciones tan complejas como en el caso del juego de firma valenciana Robox y del cual se vendió una copia por cada cincuenta descargadas ilegalmente.
En frente de esto en los últimos tiempos la industria ha vivido un renacimiento gracias a dos factores. El primero el cierre de Megauload en enero y el segundo los intentos de poner en marcha la ley Sinde-Wert.
De todos modos el sector teme que pueda producirse una bajada de las ventas si finalmente el caso contra Kim Dotcom y su creación acaba siendo favorable a la parte de éste.
En resumen, un sector muy frágil pero a la vez tan productivo, peligra y las soluciones son de momento muy lejanas.