Es la guerra; pero, por suerte, incruenta y hasta beneficiosa. Por lo menos para quienes conducen. La guerra entre fabricantes de automóviles para llegar al primer auto de nivel 5 de autoconducción que pueda circular por las calles del mundo o, por lo menos, de los países que así se lo permitan.
En los distintos niveles de autoconducción, que van del 0 al 5, el 0 es el que carece de cualquier ayuda, en el 1 hay algún sistema de ayuda automatizado pero básicamente sigue siendo el conductor humano quien se lleva la principal carga de trabajo; en el 2 contamos con el concurso de pilotos automáticos, pero con funcionalidades limitadas, siendo útil para circular por autopistas y otras vías rápidas, mientras que si pasamos al 3, nos encontramos con sistemas de automatización de la conducción más completos, aunque el conductor humano todavía debe mantener la atención.
Lo bueno viene a partir del nivel 4, en el que el vehículo es completamente autónomo, aunque en vías preparadas para ello. Y, finalmente, el nivel 5, en el que sólo tenemos que entrar en el coche, marcar nuestro destino, relajarnos y disfrutar del viaje. Porque ya no hay ni siquiera volante.
Estos niveles son los marcados por SAE International (Society of Automotive Engineers).
Para que nos hagamos una idea, la funcionalidad Autopilot de Tesla tiene un nivel de 2, proporcionando por ejemplo estabilidad en el carril (centrando el coche en el carril de la autopista en el que nos encontremos), adaptando su velocidad a la vía, cambiando automáticamente de carril, o aparcando de forma autónoma entre otras.
No obstante, desde Tesla recomiendan que, siempre que se utilice la funcionalidad Autopilot, el conductor se mantenga atento a la vía y a punto para intervenir si así fuera necesario.
Cadillac, marca propiedad de General Motors ha ido un paso más allá de Tesla en el sistema Super Cruise introducido en su nuevo Escalade, y que más adelante llegará también a otros modelos de la misma firma, introduciendo funcionalidades de nivel 3.
El Escalade es un impresionante SUV de gran tamaño, muy al gusto del público norteamericano, y gracias al renovado sistema Super Cruise, permite al conductor no tener que mantener sus manos cerca del volante, aunque sí deberá seguir con atención a la vía.
Proporciona funcionalidades como cambiar de carril cuando así le sea solicitado al vehículo mediante el indicador luminoso, o bien la de moverse ligeramente dentro del carril para apartarse de vehículos de gran tamaño, como camiones. Hasta ahora, las versiones previas de este sistema mantenían al Escalade justo en el centro del carril, sin adaptar su posición según el vehículo que tuviera al lado, algo que no gustaba a muchos conductores.
Pese a que la conducción será prácticamente autosuficiente gracias al uso de sensores como los lidar, y a asistencia de sistemas de posicionamiento GPS, estará limitada a determinadas vías interurbanas, de las cuales Cadillac pone a disposición de los usuarios un mapa. En él, podemos ver como la cobertura es mayor en el tercio este del país.
Se rumorea que la futura versión de Super Cruise, y que podría llamarse Ultra Cruise, entrará de lleno en el nivel 3 de autoconducción.