Ericsson ha publicado hoy su nuevo informe Future of Enterprises, en el que destaca la importancia de que las empresas sean proactivas y resistentes ante las disrupciones. Según el informe, el 42% de los responsables de la toma de decisiones creen actualmente que se enfrentarán a interrupciones en su empresa en un futuro próximo debido a desastres naturales causados por el cambio climático. También se espera que otros acontecimientos imprevisibles generen desafíos, como la crisis energética, las pandemias y los conflictos mundiales. Y aunque reconocen que la preparación es fundamental, es necesario pasar de las estrategias reactivas a la planificación de la resiliencia a largo plazo, alejándose de la resiliencia orientada a la recuperación.
La buena noticia es que las empresas se están tomando en serio la planificación de la resiliencia: el 49% de los responsables de la toma de decisiones afirman que su empresa tiene una estrategia bien definida para hacer frente a eventos perturbadores y, entre los empleados, casi ocho veces más dicen estar preparados que no estarlo. Esa preparación está siendo impulsada por la digitalización y la automatización, ya que el 90% de las empresas que tienen estrategias de resiliencia bien definidas han demostrado estar invirtiendo fuertemente en estas áreas. Sin embargo, es importante reconocer el valor de la resiliencia proactiva en lugar de la reactiva, algo que puede no formar parte de las estrategias de muchas empresas. En esencia, hay que seguir trabajando en el clima actual.
Patrik Hedlund, investigador senior de Ericsson Consumer & IndustryLab de Ericsson, afirma: "Guerra. Crisis energética. Desastres naturales. Pandemias. Nuestro mundo se ha vuelto cada vez más complejo y ha llegado el momento de adoptar planes de resiliencia. Nunca ha sido más importante que ahora para las empresas que esperan seguir siendo competitivas y sostenibles a largo plazo. Aunque muchas de estas ya disponen de estrategias, este informe pone de manifiesto la necesidad de pasar de una resiliencia basada en la redundancia a corto plazo a una estrategia basada en la eficiencia a largo plazo".
Mediante el desarrollo de una estrategia de resiliencia más proactiva, se puede hacer aún más para mitigar las posibles interrupciones, proporcionando señales de advertencia antes de los eventos disruptivos y comprendiendo todo su impacto potencial. De hecho, seis de cada diez responsables de la toma de decisiones creen que los servicios basados en la Inteligencia Artificial (IA) y la formación en resiliencia de la Realidad Virtual (RV) implementados tras los eventos disruptivos fueron clave para manejar futuras interrupciones, lo que pone de manifiesto la necesidad de mirar las tendencias pasadas para construir la resiliencia futura.
Existe una clara necesidad de ampliar el alcance de la resiliencia en apoyo de la sostenibilidad y de un modelo empresarial con visión de futuro. Según las conclusiones del informe, hay dos cambios clave en la estrategia de resiliencia que serán fundamentales de cara al futuro:
- Pasar de una resiliencia basada en la redundancia a corto plazo a una resiliencia más sostenible desde el punto de vista medioambiental y basada en la eficiencia a largo plazo. Casi 8 de cada 10 empresas afirman que siguen aumentando la redundancia en sus cadenas de suministro en la actualidad.
- La resiliencia orientada a la recuperación debe cambiar hacia la innovación proactiva del modelo de negocio. En la actualidad, el 80% de los responsables de la toma de decisiones afirman que esto forma parte de su plan de resiliencia, y cerca de 6 de cada 10 de ellos tienen previsto aumentar estos esfuerzos en el futuro.
El informe también explica las ventajas de siete conceptos impulsados por las TIC que, en última instancia, ayudarán a las empresas a seguir siendo resistentes y sostenibles cuando se enfrenten a las perturbaciones, y analiza los diferentes caminos que pueden tomar las empresas para convertirse en organizaciones más resistentes.