Están aumentando las velocidades en la banda ancha, pero Europa debe hacer más

Las conexiones de banda ancha en Europa son mucho más rápidas que hace un año, según las estadísticas publicadas el día 25 de noviembre por la Comisión Europea. En julio de 2010, el 29 % de las líneas de banda ancha de la UE tenía velocidades de un mínimo de 10 megabits por segundo (Mbps) (hasta un 15 % más que un año antes). La banda ancha sigue extendiéndose en la UE, con 25,6 suscripciones por cada 100 ciudadanos (23,9 un año antes). El aumento anual de la banda ancha móvil es considerable y se cifra en un 45 %, con 6 dispositivos especiales de acceso móvil de banda ancha (llaves USB o mochilas) por cada 100 ciudadanos. Pero todavía queda mucho por hacer antes de que la UE alcance su objetivo de ofrecer a cada europeo acceso a la banda ancha básica de aquí a 2013 y a la banda ancha rápida y ultrarrápida de aquí a 2020 conforme a lo previsto en la Agenda Digital para Europa. La Comisión presentó en septiembre de 2010 unas medidas encaminadas a facilitar el fomento y la adopción de la banda ancha rápida y ultrarrápida en la UE.

En julio de 2010, casi un tercio de las líneas de banda ancha de la UE proporcionaba velocidades superiores a 10 Mbps (el 15 % en julio de 2009). Mayores velocidades de trasmisión de datos facilitan en general a los clientes más y mejores opciones de servicios a un precio más bajo por megabit. El 5 % de las líneas en la UE tiene velocidades medias iguales o superiores a 30 Mbps (solo el 0,5 % las tiene iguales o superiores a 100 Mbps).
 

Los nuevos servicios de ocio y negocios, como la televisión de alta definición o las instalaciones de videoconferencia precisan un acceso mucho más rápido a Internet que el existente en general hoy en Europa para poder alcanzar a los líderes mundiales como Corea del Sur y Japón. La objetivos de la Agenda Digital de cara a 2020 se cifran en un mínimo de 30 Mbps para todos y conseguir que la mitad de los hogares europeos dispongan de velocidades superiores a 100 Mbps.
 

Las nuevas estadísticas también indican que, entre julio de 2009 y julio de 2010, el número de líneas de banda ancha siguió aumentando en la UE en un 8 % (aunque con un crecimiento más lento que el 11 % del año anterior). En julio de 2010 había alrededor de 128 millones de líneas de banda ancha fijas en la UE, con 9 millones de nuevas líneas añadidas desde julio de 2009. Hay aproximadamente 220 millones de hogares en la UE.
 

Los Países Bajos y Dinamarca continúan siendo los líderes mundiales en penetración de la banda ancha (casi 40 líneas por cada 100 ciudadanos, lo que equivale aproximadamente al 80 % de los hogares). Las tasas de crecimiento se están reduciendo según maduran los mercados y se acercan a la saturación (en los Estados miembros en cabeza, como Finlandia y Suecia, los índices de penetración de la banda ancha fija están disminuyendo de hecho, seguramente por el paso de la banda ancha fija a móvil).
 

Nueve países de la UE (Alemania, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Luxemburgo, los Países Bajos, Suecia y el Reino Unido) tienen niveles de penetración de la banda ancha superiores a los de los Estados Unidos (las tasas estadounidenses son de 26,4 suscripciones por 100 habitantes, según las estadísticas de la OCDE de mayo de 2010). Chequia y Grecia registraron los mayores progresos el año pasado (en aumento per cápita).
 

Las líneas de abonado digital (DLS) siguen siendo la tecnología más común de acceso a la banda ancha en Europa con 100 millones de líneas, pero su cuota de mercado está disminuyendo en favor de las arquitecturas de fibra de alta velocidad y el cable Docsis 3.0 (una mejora de las redes de cable que permiten un Internet a muy alta velocidad). La fibra al hogar (FTTH) aumentó un 40 % entre julio de 2009 y julio de 2010, pero solo representa actualmente el 1,7 % de las líneas totales en Europa al existir únicamente en algunos países (sobre todo Suecia, donde el 24 % de las líneas de banda ancha es FTTH).
 

Aumenta rápidamente la banda ancha móvil

El acceso de banda ancha móvil (por ejemplo, mochilas para ordenadores portátiles) está penetrando en varios Estados miembros, especialmente en Finlandia (21,5 líneas de acceso de banda ancha móvil mediante llaves USB, tarjetas de datos o mochilas por cada 100 ciudadanos), Austria (16,7), Suecia (14), Dinamarca (13,4) y Portugal (12,1). La penetración de la banda ancha móvil se cifra actualmente en Europa en un 6 %, lo que representa un aumento del 45 % desde julio de 2009.

La cuota de mercado media de los operadores de las telecomunicaciones preexistentes en la UE se redujo ligeramente hasta más o menos un 44 % (registrándose los porcentajes más altos en Chipre con un 76 %, en Finlandia con un 68 % y en Luxemburgo con un 66%, mientras que los más bajos fueron en Rumanía y el Reino Unido con un 28 % y en Bulgaria con un 32 %). Sin embargo, el control de estos operadores preexistente de los mercados de banda ancha (incluida la reventa de líneas al por mayor) está disminuyendo de forma estructural en beneficio de la competencia en la base de infraestructura (principalmente gracias a la desagregación del bucle local, que permite el acceso de terceros a la red). Los bucles locales completamente desagregados y las líneas de acceso compartido representan el 74,8 % de las líneas de abonado digital (DLS), frente al 71,4 % hace un año. El aumento del número de bucles locales desagregados, aunque sea más lento que el año pasado, se produce a expensas de la reventa, un tipo de acceso que exige escasa inversiones de los nuevos operadores, el cual ha disminuido desde el 10,6 % al 8,9 % de las líneas DLS desde 2009. Los nuevos operadores de telecomunicaciones parecen haber invertido cada vez más y han contribuido a crear un mercado de banda ancha más competitivo.
 

El paquete de banda ancha presentado en septiembre de 2010 comprende una Recomendación de la Comisión sobre el acceso regulado a las redes de acceso de próxima generación (NGA) que vela por un equilibrio correcto entre la necesidad de fomentar la inversión y la de salvaguardar la competencia (véase MEMO/10/424), una propuesta de Decisión por la que se establece un programa de política en materia de espectro radioeléctrico para garantizar, entre otras cosas, la disponibilidad de espectro para la banda ancha inalámbrica (véase MEMO/10/425), y una Comunicación sobre el fomento de las inversiones (véase MEMO/10/427).