Si eres usuario de Google Pay, tal vez en el momento de leer estas líneas ya hayas notado algún cambio en la aplicación o, incluso, que no encuentres su icono allí donde lo habías dejado, pues que este ha cambiado, así como la app de nombre: ahora se llama Google Wallet.
La multinacional de Mountain View lleva a cabo este cambio para potenciar las demás cualidades de su cartera electrónica que van más allá de configurar tarjetas de crédito y pagar con ellas gracias a la tecnología NFC de los smartphones, y que consisten en almacenar una serie de tarjetas de fidelización, títulos de transporte, billetes de avión, llaves digitales (para el coche, para nuestro hogar, para una habitación de hotel,...) e incluso documentos oficiales, como permisos de conducir.
Naturalmente, la posibilidad de disponer en nuestro smartphone de documentos legales que nos puedan identificar, varía según el país y su correspondiente legislación; por ejemplo, en España, existe la posibilidad de contar con el DNI 4.0 que ofrece dicha posibilidad, pero que todavía no es reconocido oficialmente para llevar a cabo trámites, mientras que en Portugal hace años que el gobierno emite una app para varias plataformas que permite a sus ciudadanos contar con una versión digital de su documento de identificación (cartão de cidadão, el equivalente al DNI español) y utilizarla en trámites.
De esta forma, Google homologa su aplicación de cartera virtual con la de Apple, que es muy popular entre los poseedores de un iPhone, y que permite toda suerte de títulos y documentos.
Hasta ahora, Google Pay ya disponía de estas posibilidades, pero con el cambio, se les da una mayor relevancia, se simplifica la interfaz de la aplicación y, sobre todo, con el cambio de nombre se explicita su función de ser una cartera digital, más que solamente una forma de vehicular pagos.
Si la actualización todavía no ha llegado a tu teléfono, no te preocupes, te va a llegar pronto, aunque también puedes buscarla en la tienda de aplicaciones Google Play para forzar su instalación.