Del 2 al 6 de diciembre se llevó a cabo en Tallin, Estonia, la edición 2024 del Cyber Coalition, un ejercicio de defensa cibernética de la Alianza Atlántica. En la edición de este año se dieron cita 28 de los 32 países que conforman esta alianza, además de seis naciones asociadas y diversas organizaciones civiles internacionales.
Bajo la dirección del Mando Aliado de Transformación de la Alianza, esta iniciativa ha venido realizándose anualmente desde 2008 con el objetivo de facilitar la coordinación entre aliados y socios, impulsar el intercambio de conocimientos y compartir prácticas para la ciberprotección de sus redes.
Durante esta edición se recrearon situaciones inspiradas en amenazas digitales actuales, como ataques de ransomware, intrusiones con posible respaldo estatal, y vulneraciones de infraestructuras críticas.
Entre los participantes, se contó un equipo del Mando de la Fuerza Conjunta de Brunssum (JFCBS, por el nombre de la población holandesa homónima, fronteriza con Alemania), aportando su experiencia en un entorno de entrenamiento especializado.
El Brigadier General Bruno Helluy, desde el Mando de la Fuerza Conjunta de Brunssum, destacó la necesidad de integrar el ámbito cibernético con las operaciones en tierra, aire, mar y espacio, lo que permite fomentar la cooperación entre estructuras militares y civiles. Según señaló, la coordinación en el entorno digital resulta crucial para mantener la resiliencia de los sistemas vinculados a la Alianza.
La delegación del JFCBS en Tallin, encabezada por el Coronel Piotr Adamski, subrayó la importancia del ciberespacio en las estrategias de defensa contemporáneas. Las actividades del ejercicio apuntaron a reforzar la capacidad de respuesta ante actores que buscan vulnerar la estabilidad digital de la OTAN.
En total, se congregaron alrededor de un millar de participantes procedentes de los distintos países aliados, junto con socios y representantes de la Unión Europea.
La ejecución del ejercicio Cyber Coalition 2024 se desarrolló a través del Centro de Ejercicios y Entrenamiento de Ciberseguridad de Estonia, utilizando una plataforma técnica avanzada. Los equipos de formación y las audiencias se conectaron de forma remota, mientras que el equipo de control permaneció en territorio estonio para coordinar las actividades.
Concluida la edición de este año, la iniciativa se consolida como un espacio relevante para mejorar las capacidades de defensa en el ámbito digital de todos los miembros de la Alianza Atlántica, reforzando la cooperación entre los aliados y adaptándose a las dinámicas cambiantes de las amenazas cibernéticas.