IFS, especialista en soluciones empresariales cloud e IA Industrial, advierte que, según su último estudio global realizado entre 815 líderes de la industria de fabricación, el sector enfrenta un punto de inflexión crítico debido a la denominada "parálisis por análisis" o sobrecarga de opciones. Aunque estos líderes reconocen la importancia de la transformación digital, la abrumadora cantidad de posibilidades disponibles les deja incapaces de tomar decisiones estratégicas para aprovechar los avances en su industria.
“Según nuestro último análisis, si bien todos los líderes encuestados reconocen que sus empresas dependen de la tecnología para sobrevivir, menos del 10% se consideran líderes digitales. De manera alarmante, el 65% se calificaron como "rezagados", indicando que están peligrosamente estancados en las primeras etapas de la transformación digital y carecen de planes concretos para avanzar” explica Magie Slowik, Industry Director para Manufacturing en IFS.
Así mismo, el estudio asegura que el 82% de los fabricantes afirman que su negocio no sobrevivirá más de 1-3 años sin un compromiso más fuerte con la tecnología. La urgencia es clara: las turbulencias del mercado, las interrupciones de la cadena de suministro y el impacto inminente del cambio climático hacen que la transformación digital sea una necesidad para la supervivencia, no una opción.
Por el contrario, aquellas que son líderes digitales confían en que pueden capear futuras tormentas, ya que más de una cuarta parte (28%) cree que pueden durar hasta cinco años sin nuevas inversiones. Y aunque un prometedor 39% está desarrollando activamente iniciativas ESG, la mayoría de los fabricantes (71%) carecen de una estrategia ESG óptima, a pesar de que el 28% identifica el cambio climático como una de las principales preocupaciones.
La investigación culpa a un estado debilitante de "parálisis por análisis". “Cuando se les pidió que priorizaran las tecnologías, más del 80% de los encuestados enumeraron todas las opciones como esenciales, lo que subraya la confusión que impide una acción decisiva” explica la líder de fabricación en IFS.
Esta situación se ve agravada por el hecho de que cada nivel de trabajo se dirige a una dirección diferente. Casi todos (94%) los ejecutivos de C-suite creen que la nube es la tecnología más importante para los esfuerzos de transformación digital, sin embargo, el personal de operaciones señala a los gemelos digitales (85%) y la IA (84%). Mientras que los que están en el nivel de vicepresidente son los más propensos a creer que IoT (81%) es la tecnología más importante en la que centrar los esfuerzos de transformación digital.
Por su parte, los líderes digitales a la vanguardia invierten el 45% de su presupuesto en transformación digital, impulsados por estrategias claras e inversiones centradas en el retorno de la inversión.
Con todo ello, una quinta parte de los encuestados señala que la gestión del cambio (22%) y la complejidad de TI (21%) son las principales barreras.
Construyendo un futuro mejor
A pesar de los desafíos de embarcarse en proyectos de transformación digital, los fabricantes siguen siendo optimistas sobre sus perspectivas con herramientas de próxima generación. Al observar las cadenas de suministro, por ejemplo, casi todos (98%) de los fabricantes están considerando estrategias geográficas para optimizar su resiliencia, optando por destinos de abastecimiento más cercanos o políticamente estables. En este sentido, los líderes digitales utilizan estrategias avanzadas, como la simulación de escenarios, mientras que los rezagados confían en herramientas de evaluación de riesgos independientes.
En cuanto a la huella de carbono, los fabricantes tienen una visión positiva sobre el impacto de los criterios ESG en sus negocios. Lo que antes era solo una obligación legal, ahora se ve como una oportunidad para mejorar tiempos de entrega, calidad y desarrollar nuevos modelos de negocio, como la economía circular.
La industria manufacturera enfrenta un momento crucial. Aunque muchos comprenden la urgencia, la indecisión los mantiene paralizados, esperando resultados probados o guía externa antes de actuar, afirmó Slowik. “Cuanto más se demoran, más se rezagan. En el mercado actual, la resiliencia y la madurez digital son indispensables para sobrevivir”.