El sector turístico y de los viajes y hostelería en general ha sido uno de los que más (si no el que más) ha sufrido las medidas de contención de la pandemia de COVID-19 aplicadas en todo el mundo, con casos especialmente sangrantes en los países cuyo PIB depende en gran medida de este sector, como es el caso de todo el sur de Europa.
Pensando especialmente en dicho sector además de empezar a disfrutar de algo que se parezca a la vida normal de antes de la pandemia, hace unas semanas que cobró fuerza en la Unión Europea el establecimiento de un pasaporte de vacunación, un documento en formato electrónico o papel, que permita asegurar que su portador ha sido vacunado.
Este pasado jueves día 25 de marzo, el Parlamento Europeo decidió la tramitación por vía de urgencia de esta propuesta, bautizada como Digital Green Certificate, lo cual podría redundar en que en junio dicho documento ya pueda estar operativo, a tiempo para la temporada turística.
De esta forma, podría dinamizarse de una forma que las autoridades consideran segura, los viajes y el sector vinculado con el turismo, aunque tras el verano redundaría en beneficio también del sector de la organización de eventos, tales como ferias y congresos.
¿Qué características tendrá?
Será de expedición gratuita, y estará basado en un código QR, ya sea en formato digital (para llevar en el smartphone) o papel (para aquellas personas que no utilicen dispositivos electrónicos).
Será válido en todos los países miembro de la Unión Europea, además de que también se buscará que sea aceptado por otros países del viejo continente que no están dentro de la Unión, tales como Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein. Nada se menciona del Reino Unido...
Este pasaporte certificará tanto que su portador ha sido vacunado, como que se ha sometido a un test que ha resultado negativo, como que se ha recuperado de la COVID-19 (quienes la han pasado quedan inmunizados durante unos meses).
Serán las autoridades de los diferentes estados miembros las que se encargarán de la expedición de estos certificados, que se encontrarán disponibles en las distintas lenguas oficiales de los países miembro, y en inglés.
La seguridad vendrá dada por un sello digital (a definir) que asegurará su veracidad. Además, cada lugar de expedición (por ejemplo, si se trata de un hospital, centro de realización de tests, o departamento gubernamental) firmará con su propio sello, de forma que podrá ser identificado el origen del pasaporte.
De la infraestructura del backend que deberá llevar a cabo la validación del código QR y el certificado de expedición, se encargará la propia Unión Europea.