En el marco de su convención anual, la VMworld, la especialista en tecnologías y servicios de virtualización y de computación en la nube VMware ha anunciado un acuerdo con NVIDIA para proporcionar una solución de extremo a extremo para las tareas de inteligencia artificial.
NVIDIA pondrá sus DPUs (unidades de procesamiento de datos) en el borde de la red, mientras que VMware pondrá la infraestructura cloud necesaria, y ambas empresas crearán una nueva arquitectura para los centros de datos basada en la tecnología SmartNIC, incluyendo NVIDIA BlueField-2.
Las soluciones de inteligencia artificial de NVIDIA NGC se integrarán en los productos y sistemas de VMware: vSphere, Cloud Foundation, y Tanzu. De esta forma, se obtendrán soluciones de muy fácil adopción y despliegue, y ampliamente escalables a las necesidades de las empresas usuarias y los proyectos.
La administración de estos sistemas también se verá simplificada y, más allá de las aplicaciones propias de la inteligencia artificial, esta nueva arquitectura también beneficiará a las cargas de procesamiento de las aplicaciones corporativas tradicionales.
Además, añadirá una capa de seguridad adicional a las aplicaciones, mediante una nueva arquitectura que descarga los servicios críticos del centro de datos de la CPU a las SmartNIC y las DPUs programables.
Un VMworld desacostumbrado
En cualquier otro año, VMware hubiera celebrado dos ediciones de su convención VMworld: una en los Estados Unidos (probablemente en San Francisco) a finales de agosto, y la otra en Europa (concretamente en Barcelona), en noviembre. Pero este año no es cualquier año.
La pandemia ha afectado, como a tantos otros eventos, también al VMworld, que no solamente se ha visto cancelado de forma presencial tanto en uno como en otro continente, sino que se ha visto reformulado y realizado online.
Desde las sesiones como la keynote, hasta los encuentros con la prensa, todo se ha hecho de forma virtual para ser consumido en directo o en diferido, a través del sitio web de la convención, y con una producción de vídeo profesional.
Quien pierde este año con la anulación del encuentro presencial son las ciudades que venían alojando ambas ediciones.