¿Queremos un chatbot dedicado a la asistencia técnica a los usuarios de productos y servicios tecnológicos? ¿o a un negociador experto? ¿o a uno que nos enseñe matemáticas? A partir de ahora, podremos personalizar instancias de ChatGPT para que actúen acorde con nuestras necesidades, o con las necesidades de aquellas personas a las que debamos prestar servicio, gracias a la nueva actualización que OpenAI ha llevado a su ya famoso chatbot.
Anunciada recientemente, dicha actualización se conoce como GPTs, y consiste en la posibilidad de crear sistemas expertos para finalidades específicas, derivados de ChatGPT, pero a los cuáles se les imprime un carácter más particular, suministrándoles instrucciones, conocimiento extra, y las habilidades que necesite. Es, en definitiva, programar un chatbot sin usar herramientas de desarrollo ni necesitar conocimientos de programación.
Por el momento, esta funcionalidad solamente se encontrará disponible para los usuarios Plus y Enterprise de ChatGPT, es decir, aquellos que pagan por tener acceso al chatbot, aunque desde OpenAI están estudiando ponerla al alcance de más usuarios, lo que significa que pueda estar disponible también para los usuarios gratuítos en un futuro sin fecha concreta.
También en un futuro próximo, los usuarios que lleven a cabo las personalizaciones de chatbots basadas en ChatGPT, podrán monetizar su trabajo vendiendo sus creaciones personalizadas en la futura tienda de GPTs, que OpenAI ya ha anunciado para más adelante, y en la cual estaría trabajando ahora.
Además de sus capacidades internas, los desarrolladores pueden definir acciones personalizadas, integrando GPTs con datos externos y disfrutando de acceso a Internet.
Seguridad y privacidad aseguradas
Al ser los GPTs creaciones de otros usuarios, puede asaltarnos la duda sobre si, al utilizarlos con datos propios, estos pueden acabar en manos de terceras partes que puedan, incluso, perjudicarnos.
Este no será el caso, afirman desde OpenAI, ya que ni los chats ni los archivos anexos que puedan involucrar, serán compartidos con los creadores de los chatbots personalizados, y si algún GPT utiliza APIs de terceros, los usuarios mantendrán el control sobre el envío de datos. Además, los creadores pueden decidir si los chats con su GPT se utilizan para mejorar y entrenar modelos, reforzando las opciones de privacidad ya existentes.
La revisión de los GPTs para que cumplan con las políticas de uso de OpenAI es otro aspecto crucial. Se han implementado nuevos sistemas para prevenir la distribución de GPTs dañinos o inapropiados, como aquellos que involucran actividades fraudulentas o contenido para adultos. La identidad del creador se identifica para cada uno de los GPTs puestos a disposición de la comunidad.
La introducción de los GPTs coincide en el tiempo con la actualización de la base de datos de ChatGPT para abarcar sucesos ocurridos hasta abril de 2023. Por ejemplo, el chatbot ya puede responder a preguntas sobre la invasión rusa de Ucrania, cosa que hasta hace poco no podía responder por no tener conocimiento del tema.
