El fenómeno de las Redes Sociales en todo el mundo es incuestionable. Según un informe elaborado por la consultora InSites Consulting, en el mundo existen 940 millones de personas registradas en distintas Redes Sociales. La forma de comunicarse, de compartir información y de disfrutar del tiempo de ocio ha evolucionado: pero, ¿sólo del tiempo de ocio? Parece ser que no, ya que se calcula que el 54% de los españoles accede a estas redes en horario de trabajo.
Este hecho tiene una doble visión: Estudios de la Universidad de Melbourne afirman que los trabajadores que utilizan las redes sociales en su puesto de trabajo son un 9% más productivos ya que los breves descansos que hacen para conectarse permiten que vuelvan a su actividad más despejados. Además de mejorar el rendimiento de sus plantillas, también puede mejorar la reputación digital de su marca. Pero la cara negativa de esta tendencia también es preocupante y la encontramos en que esta actividad puede atraer el espionaje corporativo o generar lagunas en la red de seguridad de la compañía.
Según expertos analistas de Kaspersky Lab, las principales amenazas que acechan a los usuarios de estas redes son el robo del registro de usuario de una cuenta, robo de contraseñas, ataques drive-by, y la propagación de adjuntos maliciosos a través de los sitios web. Es cierto que existen muchos aspectos preocupantes en cuanto a la seguridad TI, pero prohibir el uso de estas Redes Sociales en la empresa no es la mejor solución. La clave para que nuestro equipo esté protegido en todo momento frente a estos ataques está en el ‘sentido común’, hay que ser conscientes de a qué nos enfrentamos e informar a los empleados de los peligros y cómo evitarlos. Así por ejemplo:
-Comprobar la configuración de protección de datos
-Tener precaución con lo que se publica en las redes sociales
- Prestar atención a las solicitudes de amistad recibidas, pueden ser falsas
-Proteger la propia identidad
-Evitar ataques de malware a través de mensajes tipo “vídeo muy gracioso”
Además de todo esto, es necesario disponer de una solución de seguridad adecuada que permanezca siempre actualizada y con los últimos parches instalados. De este modo, el acceso de los trabajadores a sus perfiles de la red social en horario laboral no supondrá un problema para la información corporativa y datos confidenciales de la organización.