Las noticias, temas o palabras más usuales en los últimos tiempos en el mundo de las Telecomunicaciones (fibra, velocidad de trasmisión, inversiones, costes, etc...) parece que tengan a veces posturas contrapuestas.
Claramente el mundo de la transmisión de datos cada día aumenta y sobre todo pone a prueba la capacidad de las actuales redes y supone un reto para las tecnologías venideras. En la actualidad nadie pone en duda la gran capacidad y rendimiento que ofrece la Fibra Óptica para la gran mayoría de necesidades de las empresas, pero a nadie escapa también que los costes de estas infraestructuras son muy elevados.
En Vodafone sabemos que todo esto es cierto, de hecho tenemos una de las redes de fibra más grandes del país, sobre todo para la capacidad de nuestros nodos de conexión de la red móvil. Nuestra visión a largo plazo en este sentido, igual que lo ha sido en el ADSL fijo clásico, es que cada vez más las redes móviles irán absorbiendo más tráfico y sustituyendo a estas infraestructuras terrestres. Las razones son claras: aumento progresivo de velocidades, descenso progresivo de precios y facilidad de contratación y disponibilidad del servicio.
Barcelona disfruta ya de tecnología “HSPA+ Dual Carrier 43,2 Mbps”, con la que ha duplicado la capacidad de su red en zonas clave de conexión en la capital. Con este despliegue, los usuarios mejoran muy notablemente la experiencia de navegación. Pueden navegar, compartir y transferir archivos con velocidades de subida con capacidad hasta 43,2 Mbps y 5,7 Mbps de bajada.
Estas características han hecho que el "ADSL móvil" sea un claro sustituto de una parte importante del tráfico fijo. Además, las tendencias actuales de los tablets y smartphones hacen que los "datos móviles" sean el futuro de las conexiones a Internet.
El reciente reparto de espectro que permitirá la futura migración a tecnologías avanzadas de banda ancha móvil como LTE y LTE Evolution, de los que Barcelona será máximo exponente y capital mundial de esta tecnología gracias a su posición como sede del Mobile World Congress. La disponibilidad de velocidades de hasta 100 Mbps augura aún más lo comentado anteriormente con respecto al futuro de los datos y desde qué redes viajarán.
El coste de las inversiones para esta migración tecnológica no es poco y la actual presión competitiva del propio mercado y de los reguladores pueden frenar una tecnología que tiene todo el sentido reforzar, ya que soluciona viejos asuntos como el de la brecha digital del territorio. Uno de los retos importantes ahora mismo es garantizar acceso universal a la banda ancha móvil también en zonas rurales, donde actualmente por sus características particulares no disponen de banda ancha fija.
Vodafone ha dado un paso al frente en este sentido para garantizar un acceso universal a todas aquellas poblaciones de menos de 1.000 habitantes. Este proyecto se extenderá a 3.100 poblaciones de toda España antes de marzo de 2012. En Cataluña, Vodafone realizó una inversión de 6,5 millones de euros en despliegue de cobertura en el anterior ejercicio y la cobertura alcanza a 234 municipios de menos de mil habitantes en toda la región. De esta forma se consigue que los habitantes de zonas rurales también puedan disfrutar de los beneficios de la sociedad de la información.
Dicho esto, la convivencia de las tecnologías actuales es el mejor de los escenarios y cada necesidad debe encontrar su tecnología y su red. Lo verdaderamente importante es que encontremos vías de colaboración lo más abiertas posibles entre todos los jugadores (operadores, reguladores y administraciones públicas) para situar a Catalunya a la cabeza de la innovación y el progreso tecnológico y mantener los canales de comunicación con los ciudadanos y las empresas. Todo esto ayudará a mejorar la situación actual y nos situará en una situación inmejorable para afrontar los retos futuros.
