¿Dónde está mi clienta?Escrito por Pablo Nowenstein el 18/05/2011 a las 17:24:054290
Internet ha revolucionado el escenario de las compras y las ventas. No sólo ha cambiado la forma de comprar y modificado los hábitos de consumo, sino que también ha acortado distancias haciendo posible visitar las tiendas de cualquier lugar del mundo, cualquier día y a cualquier hora. Una indudable transformación del escenario sobre el que no varía el principal protagonista: la mujer. Ir de compras, ya sea en la calle o en el universo online, sigue siendo, principalmente, cosa de mujeres. Son ellas las que buscan, comparan y, finalmente, toman la decisión de comprar. Una tarea que, gracias a Internet, pueden compaginar sin problema con el trabajo, la familia, los amigos o incluso el tiempo que dedican a sus hobbies. La compra online se adapta perfectamente al actual ritmo de vida frenético, ayudándonos a ahorrar tiempo.
Y es que, desde que Internet se convirtió en un nuevo espacio de compra, cada vez más son las mujeres que, bien por comodidad, bien por preferencias, deciden hacer sus pedidos online. Y mientras tanto, el e-commerce centra gran parte de sus esfuerzos en responder a una pregunta: ¿Dónde esta mi clienta?
Pues éstos tienen que saber que una de cada tres mujeres es una verdadera e-compradora, es decir, pertenece a ese grupo que representa el ideal de clienta que cualquier e-shop desea. Para acotar esta búsqueda, aquellos que deseen aumentar su clientela, deberán prestar especial atención a madres, trabajadoras, con edades comprendidas entre los 32 y 37 años y con un nivel adquisitivo alto.
Pero el comercio electrónico, como todo, no es una ciencia exacta de modo que no sólo bastará con saber quien es tu potencial clienta. Tras realizar un exhaustivo análisis del comportamiento femenino, nos hemos percatado que sus hábitos de consumo online responden a tres momentos bien diferenciados: los tacaños –en los que prima el precio-, los momentos racionales –aquellos en los que adquieren productos necesarios, comparando calidad y precio- y, finalmente, los placenteros, en los que la compra es compulsiva. En este sentido, llegar a nuestra potencial clienta se convierte, en cierto modo, en una tarea compleja, teniendo en cuenta que los otros dos tercios de población femenina son meras espectadoras de los escaparates online.
Así, no es de extrañar que en los últimos años las campañas de email marketing hayan protagonizado un crecimiento exponencial y se hayan perfilado como uno de los canales más eficaces a la hora de generar tráfico en la red y de conseguir aumentar el volumen de las ventas. Las empresas no sólo se han dado cuenta de la necesidad de dar a conocer sus servicios y productos a través de este canal, sino que han visto que pueden guiar la acción de compra de los internautas a través de una buena campaña de email marketing.
En realidad, hay algunas cosas que nunca cambian. Sólo varían las formas de hacerlo.
Pablo Nowenstein
Fundador de Emailing Network
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