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La realidad aumentada de Apple, ni es realidad ni aumenta

Escrito por Victor de la Fuente el 17/10/2023 a las 16:18:20
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(eCommerce Strategy specialist en Nestlé | Consultor Freelance)

Cada vez se acerca más el lanzamiento de las VisionPro de Apple, sus gafas de realidad aumentada, y paradójicamente, ni el usuario verá la realidad, ya que la imagen es proyectada por vídeo a las lentes, y ni los que ven al usuario con las gafas puestas ven a la persona sino a una representación de sus ojos en las gafas o de su cara en las llamadas. 

 

¿Supone esta disonancia, esta desconexión con la realidad, algún problema para los compradores? 

 

A otro nivel, ya sufrimos esta disonancia en redes sociales donde estamos expuestos a una curación de la realidad con filtros, producción y guionización. Ni el usuario que publica lo está viviendo realmente, vive para la foto o para una situación artificial y prefabricada, y ni el follower / espectador que lo visualiza está viendo una representación fidedigna de la realidad.

 

Siguiendo a un nivel aun más profundo y más allá del mundo digital, vivimos con el ‘sesgo de nuestros sentidos’: pensamos que lo que vemos o percibimos es la realidad cuando, en realidad, no la percibimos como tal sino una experimentamos una representación de la misma a través de lo que procesa nuestro cerebro y nuestros cinco sentidos. ¿Qué realidad “veríamos” si tuviéramos ocho sentidos? ¿Y si tuviéramos más afinado un sentido respecto a otro?

 

El problema, en cualquier caso, no es lo fiel de la representación de la realidad (aumentada, extendida o física) sino que en este caso está controlada por Apple. La empresa de Cupernico es el filtro de facto de lo que te proyecta y cómo. Quizá ceder el control de la realidad a una empresa es un precio muy elevado por ver una película de forma un poco más inmersiva.

 

Justamente, en los vídeos de presentación de las gafas no hay ningún ejemplo de dos personas en el mismo ambiente interactuando ni viendo la misma película a la vez. Un entorno inmersivo dedicado solo a una persona. Una muestra más del nihilismo actual. Nada de ver películas en familia. Seguramente es así porque asumen que un hogar no va a adquirir más de unas gafas si cada una cuesta 3.500€.