La videoconsulta una aportación clave al sistema sanitarioEscrito por Juanjo Villanueva el 09/05/2023 a las 18:56:482166
(Catedrático emérito de la UAB) La pandemia ha mostrado que la falta de personal sanitario, y en particular el de atención primaria es uno de los principales problemas de nuestro sistema de salud. Las dificultades presupuestarias, junto con el envejecimiento de una población que demanda cada vez más atención médica, no permiten ser muy optimistas respecto a la evolución del problema.
Una aproximación para agilizar los recursos existentes ha sido la introducción de las videoconsultas simples paciente-médico (aquellas que solamente son una videoconferencia), las cuales han reducido esperas y riesgos de contagio por visitas presenciales y han evitado desplazamientos de pacientes y médicos.
En el ámbito privado, las iniciativas de videoconsultas simples han sido numerosas, ya sea por compañías de telefonía, como, por ejemplo, Movistar o Yoigo, o mutuas asistenciales como Mapfre o DKV, o plataformas especializadas como Opensalud o Docline. También en el ámbito público ha habido experiencias, algunas no exentas de polémica, como es el caso de la Comunidad de Madrid.
El líder del sector de las visitas médicas virtuales es la norteamericana Teladoc Health que tiene su división internacional en Barcelona para todo el mundo, excepto EE.UU, y donde también está instalando el primer centro europeo de I+D. El número de visitas gestionadas por Teladoc Health en 2021 fueron de 15,4 millones de visitas virtuales con unos ingresos de 2.032 millones de dólares. Está compañía suele trabajar a través de otras empresas como es el caso de Telefónica y en colaboración con hospitales de referencia.
Sin embargo, el problema de las videoconsultas simples es que solo permiten hacer un primer análisis subjetivo ya que no proporcionan al médico los datos de las exploraciones necesarias para hacer un diagnóstico fiable.
Las carencias de las videoconsultas simples han llevado a diseñar soluciones que permitan hacer videoconsultas optimizadas, como, por ejemplo, el sistema T-One en España o la australiana Visionflex, donde además del dialogo con el paciente, como en las videoconsultas simples, se añaden exploraciones con dispositivos conectables que proporcionan información objetiva on-line al médico en remoto.
Estos sistemas están formados por un maletín o mochila con dispositivos como fonendoscopios, dermatoscopios, otoscopios, iriscopios, electrocardiógrafos, tensiómetros, oxímetros, entre otros. En algunos casos el sistema se puede configurar según las necesidades del usuario. Adicionalmente, hay sistemas, como T-One, que son abiertos y pueden utilizar una plataforma de videoconferencia estándar, encriptada y gratuita.
Hay muchos posibles sectores usuarios de estos sistemas como residencias de mayores, farmacias, poblaciones rurales, empresas, prisiones, etc., que generalmente establecen la comunicación a través de conexiones terrestres. También se pueden usar en entornos más remotos como barcos mercantes o de pesca, ONG’s en el tercer mundo, plataformas petrolíferas, bases científicas, misiones militares, etc., donde la conexión se puede realizar por satélites de baja cota que permiten minimizar las latencias.
La Telemedicina con videoconsultas optimizadas puede proporcionar al médico a distancia información objetiva para obtener diagnósticos fiables y mejorar la atención a los pacientes allí donde se encuentren, aliviar la congestión de los centros sanitarios disminuyendo el flujo de pacientes hacia ellos y reducir la huella de carbono evitando desplazamientos innecesarios. |