Actualizado el 17/12/2024

icon Facebook icon Twiiter icon RSS icon EMAIL
  1. Portada
  2. >
  3. Opiniones
  4. >
  5. ¿Por qué se hacen llamar Autor cuando quieren decir Copista?

¿Por qué se hacen llamar Autor cuando quieren decir Copista?

Escrito por Pau Jane i Jané el 03/07/2009 a las 18:06:23
1798

(Director General)

Hoy parece que uno de los temas estrella al hablar de Internet es el de la piratería, y cómo afecta a los pobres creadores. Con la infoxicación que estamos sufriendo en el tema, quería aportar unos breves apuntes. Yo creo que tenemos que distinguir, si hablamos de sectores, cómo afectará a: Obra escrita Música Audiovisual (no sólo películas y series) Juegos Y si hablamos dentro de cada sector, hay que analizar por separado el impacto en: Los creadores (músicos, escritores, en el cine no sabría decir si guionistas, directores, actores, etc.). Aquí incluiría a las empresas que producen estas creaciones. La cadena de valor que hace llegar las creaciones a los consumidores. Se puede hablar de la propiedad intelectual, del copyleft, de si 70 años son muchos o pocos, del derecho a la copia privada, etc., etc., pero creo que, en cualquier caso, todo esto sólo puede aplicar a los creadores (sean personas físicas o jurídicas). Jamás puede usarse como argumento para defender al resto de la cadena de valor, que no son autores, sino gente que se ha dedicado a producir copias de las creaciones de los autores. Aquí creo que el análisis debe hacerse por separado para los cuatro tipos de autores. Propondré cuatro reflexiones más adelante. Pero si hablamos de editoriales, discográficas,? es decir, de las empresas que han basado hasta ahora sus ingresos en la distribución de copias físicas, es evidente que Internet les ha trastocado el negocio? ¿y qué? En general, esto le ha pasado a toda la distribución, ¿no? O, por poner otro ejemplo, que les pregunten a las empresas de revelado fotográfico. También la invención del frigorífico alteró el negocio de las empresas que distribuían hielo. Unas sucumbieron, otras se adaptaron, pero el mundo siguió. El propio sector editorial surgió a raíz de un invento llamado imprenta que en su día revolucionó tanto como Internet, ¿no? Lo que está claro es que, en el caso del audiovisual, se las prometían felices porque el DVD suponía la aparición de nuevas ventanas de explotación (igual que la aparición del VOD y la TV de pago), pero ésta ha quedado mermadapor la misma tecnología que la ha hecho posible. Se siente. Va todo en el paquete. En general, podrán seguir generando ingresos por la distribución y venta de copias físicas, si éstas aportan cierto valor más allá de la mera transmisión del contenido. Creo que el sector editorial lleva años compitiendo con las bibliotecas públicas, y si la gente sigue comprando libros, será porque algún valor les debe asignar que justifican el precio pagado. Pasemos a los creadores. Escritores. Hasta ahora, no parece que sufran (merece la pena leer la siguiente entrevista: http://www.diariodeburgos.es/noticia.cfm/Vivir/20090429/libros/son/gratis/internet/ventas/han/crecido/EE9F76D1-1A64-968D-59EB8AC9231CC73F), y eso que hay muchos best-sellers en las redes P2P (en formatos word, pdf o lit). Músicos. Parece que la salida está en vivir de dar conciertos, y usar la producción de nuevas canciones como marketing y reclamo publicitario (e ingresos por descargas en el móvil). Es decir, los músicos en activo seguirán ganándose la vida, los que ya no tengan el favor del público igual tienen que dejarlo. Tampoco parece muy distinta a la situación del resto de los mortales. Quizá lo que no era normal es que Los Pecos pegaran fuertes entre las adolescentes de mi época y, treinta años después, los dos hermanos siguieran viviendo de aquello (¿será por eso que que las voces cantantes de la sgae no son músicos en activo?). Gente del cine. Aquí, tengo que admitir que tampoco sé quien tiene el status de autor y quien no. ¿percibe el guionista un porcentaje de cada DVD vendido? ¿y los actores? No sé a quien se pretende proteger con el canon y las leyes anti-P2P. El problema que le veo es el claro divorcio entre éstos y su pretendido público, al menos en España. Supongo que cada vez que un director del archisubvencionado cine español se queja de que se descarguen sus películas, salvo honrosas excepciones los que le escuchan se deben partir de la risa, porque se descargarán cualquier otra cosa menos una película española. Creo que, sinceramente, ante cualquier cifra que se publique de bajada de espectadores, nos quedará la duda de si es más por el fenómeno P2P, por la deplorable calidad de las películas, por la crisis económica, o por combinación. Siempre saldrá lo del huevo y la gallina, si la calidad ha bajado porque es menos negocio por culpa de las descargas, o si hay descargas porque como la calidad es baja, no merece la pena ir al cine.</p> Pero la sensación que tengo es que como el cine español no tiene que competir por el favor del público (entre subvenciones, productoras de capital público, etc.), lo de las descargas le ha pillado fondón y lleno de colesterol. Y usan el P2P para tapar otras miserias (por cierto, si el cine está parcialmente subvencionado, ¿qué porcentaje del canon digital debería revertir a los españoles de vuelta?). Videojuegos. Al igual que el resto de creadores, se pueden beneficiar de la desintermediación gracias al fenómeno de los juegos on-line. Hasta ahora, asociamos el juego a un software intensivo en CPU y gráficos que se juega en local, por lo que se requiere de una industria que haga copias y las distribuya. Pero nada impide a un desarrollador independiente crear juegos que se distribuyan gratuitamente por internet y funcionen mediante pago por uso. No sé, en general me parece que los debates acerca de la propiedad intelectual tienden a mezclar roles a propósito, con el objetivo de crear confusión y usarlos para defender profesiones (respetables, pero que no son la de creador) que deberán desaparecer o evolucionar, como ha pasado con tantas otras a lo largo de la historia.