Reordenamiento de las frecuencias, ¿porqué no?

Recientemente, el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio (MITYC) ha abierto una consulta pública sobre la nueva asignación de frecuencias y el reordenamiento de las bandas existentes, concretamente sobre las bandas de 900 MHz y 1.800 MHz (las que corresponden actualmente a GSM y UMTS), las de 2,5 GHz y 2,6 GHz (en las que se espera que evolucionen los servicios en movilidad para conexiones de alta velocidad) y la de 3,5 GHz (las actuales de LMDS, que se usan para conexiones WiMAX, la banda ancha rural, o enlaces punto a punto, por ejemplo). La Comisión Europea se ha pronunciado repetidamente por la neutralidad tecnológica, es decir, por no fijar la tecnología en las nuevas asignaciones frecuenciales, criterio compartido desde la Secretara de Telecomunicacions i Societat de la Informació (STSI) de la Generalitat de Catalunya. Así, esta neutralidad tecnológica ofrecería la posibilidad, por ejemplo, de ofrecer servicios de conexión de datos en movilidad en la banda de 900MHz (UMTS, para entendernos), lo que permitiría tener cobertura en las zonas rurales gracias al mayor alcance de esta banda. Hoy por hoy esto no es posible, ya que esta banda está restringida al uso de GSM, voz y datos a muy baja velocidad. Por otra parte, la neutralidad tecnológica también permitiría evitar el riesgo de optar por una tecnología concreta (entre las diferentes opciones tecnológicas del IMT-2000 y el IMT-Advanced), dando seguridad a los operadores que pueden utilizar la mejor tecnología para dar el mejor servicio a sus clientes. Se evitarían así nuevas situaciones, como la que se dio con la asignación del LMDS, que restringió los planes tecnológicos de los operadores por ir ligada a una tecnología que después se vio superada por otras. En la consulta también se pregunta por la posibilidad de realizar asignaciones territoriales de ámbito más reducido que el territorio estatal, aspecto este que desde Catalunya se interpreta como que la Generalitat pueda asignar algunas bandas de frecuencias. Esta postura se ha visto ratificada en el pacto de los presupuestos del Estado del PSOE con el PNV, donde se asegura que el Gobierno Vasco podrá otorgar, al menos, uno de los nuevos títulos habilitantes. Esta situación abre nuevas puertas para poder definir un modelo de equilibrio territorial en el ámbito de las comunicaciones electrónicas, desde el lugar donde se conoce mejor el territorio, a la vez que abre nuevos interrogantes sobre la viabilidad de estos nuevos entrantes. Creemos que en Cataluña puede existir esta viabilidad, pero también, y sobre todo, que estos nuevos entrantes tienen que tener asignación en todo el rango frecuencial para poder articular políticas propias de cobertura rural. Al respecto de todo este reordenamiento frecuencial queremos hacer dos observaciones, que el texto de la consulta no parece reflejar con la suficiente relevancia, y que nos parecen clave: Por una parte, decir que el reordenamiento y la nueva asignación son muy importantes para emprender nuevas estrategias y hacer un esfuerzo renovado en la cobertura. Esta oportunidad es única para poder forzar a los titulares de las asignaciones a ofrecer los servicios en movilidad (voz y datos a alta velocidad) a diferentes entornos con características específicas. Por ejemplo, para exigir cobertura con servicios en movilidad a polígonos industriales, centros logísticos, centros culturales, núcleos de población de más de 50 habitantes, etcétera. Es una oportunidad para evitar tener que volver a darnos cuenta de que la iniciativa del mercado no llega al equilibrio territorial deseado y que debemos ser proactivos, como por ejemplo, con la política de convenios entre la STSI y Telefónica, Vodafone y Orange para cubrir con servicios en movilidad todos los núcleos catalanes de más de 50 habitantes antes de 2010 (y llevar también la TDT y la banda ancha). Hace falta diferenciar las obligaciones en los entornos competitivos y en las áreas más aisladas y definir compromisos concretos, al igual que premiarles por ir a núcleos de población poco rentables con medidas como la redefinición del canon radioeléctrico, favoreciendo que puedan compartir infraestructuras o haciendo realidad el concepto de roaming rural a fin de que tengan que usar las infraestructuras existentes en núcleos de menos de 200 habitantes, si no disponen de propias, beneficiando así a quién sí apueste por el equilibrio territorial. Por otra parte, y más en una sociedad mediterránea amante de los entornos abiertos y las relaciones interpersonales presenciales, los nuevos servicios en movilidad son una oportunidad para pasar de un modelo productivo basado en la construcción a un modelo de más valor añadido. En la movilización de la oficina, el ocio, las redes sociales, etc, los nuevos servicios en movilidad pueden ser un factor de competitividad importante si los hacemos realidad pronto, si damos las facilidades a los operadores implantados en nuestro territorio para ofrecer comercialmente estos servicios antes que el resto de las filiales europeas de sus matrices, posicionándonos como el territorio más adelantado en los nuevos servicios, siendo referente en el proceso de concentración que se está llevando a nivel europeo. El apoyo a los operadores de nuestro territorio para hacer realidad los nuevos servicios es una buena manera de mejorar la competitividad, el cambio de modelo productivo, y al mismo tiempo darles fuerza en sus propios grupos a nivel global. Reordenar el espectro no es solamente asignar frecuencias y ganar dinero, es apostar por un crecimiento económico y por un modelo de desarrollo territorial. Ahora tenemos una buena oportunidad para demostrar lo que somos capaces, hagámoslo con responsabilidad y seamos dignos. Jordi Bosch i Garcia Secretario de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información Departament de Governació El reordenament freqüencial Recentment, el Ministeri d?Indústria, Turisme i Comerç (MITYC) ha obert una consulta pública per escoltar les parts en la nova assignació de freqüències i el reordenament de les bandes existents, concretament parlem de les bandes de 900 MHz i 1.800 MHz (les que corresponen actualment a GSM i UMTS), les de 2,5 GHz i 2,6 GHz (en les que s?espera que evolucionin els serveis en mobilitat per a connexions d?alta velocitat) i la de 3,5 GHz (les actuals d?LMDS, que s?usen per a connexions WiMAX, la banda ampla rural, o enllaços punt a punt, per exemple). La Comissió Europea s?ha pronunciat repetidament per la neutralitat tecnològica, és a dir, per no fixar la tecnologia en les noves assignacions freqüencials, criteri compartit des de la Secretaria de Telecomunicacions i Societat de la Informació (STSI) de la Generalitat de Catalunya. Així, aquesta neutralitat tecnològica permetria, per exemple, oferir serveis de connexió de dades en mobilitat a la banda de 900MHz (UMTS, per entendre?ns), el que permetria fer-los arribar a les zones rurals gràcies al major abast d?aquesta banda. Avui això no és possible, ja que aquesta banda està restringida a l?ús de GSM, veu i dades a molt baixa velocitat. D?altra banda, la neutralitat tecnològica també permetria evitar el risc de la decisió d?optar per una tecnologia concreta (entre les diferents opcions tecnològiques de l?IMT-2000 i l?IMT-Advanced), donant la seguretat als operadors que poden emprar la millor tecnologia per donar el millor servei als seus clients. Així s?evitarien noves situacions com l?assignació LMDS, que va restringir als operadors en els seus plans tecnològics per anar lligada a una tecnologia que després es va veure superada per altres. A la consulta també es pregunta per la possibilitat de realitzar assignacions territorials d?àmbit més reduït que el territori estatal, cosa que des de Catalunya s?interpreta com que la Generalitat pugui assignar algunes bandes freqüencials. Aquesta postura s?ha vist ratificada en el pacte dels pressupostos de l?Estat del PSOE amb el PNV, on s?assegura que el Govern Basc podrà atorgar, al menys, un dels nous títols habilitants. Això obre noves portes a poder definir un model d?equilibri territorial en les comunicacions electròniques des d?allí on es coneix millor el territori, alhora que obre nous interrogants sobre la viabilitat d?aquests nous entrants. Creiem que a Catalunya pot existir aquesta viabilitat, però també, i sobretot, que aquests nous entrants han de tenir assignació a tot el rang freqüencial per poder articular polítiques pròpies de cobertura rural. Però del conjunt del reordenament freqüencial en volem fer dues observacions que el text de la consulta no sembla reflexar amb prou rellevància i ens semblen claus: Un reordenament i nova assignació d?aquest abast són molt importants per poder prendre noves estratègies i fer un esforç renovat en la cobertura. Aquesta oportunitat és única per poder forçar als titulars de les assignacions a oferir els serveis en mobilitat (veu i dades a alta velocitat) a diferents tipologies d?entorns amb característiques específiques. Per exemple, per exigir compromisos per cobrir amb serveis en mobilitat polígons industrials, centres logístics, centres culturals, nuclis de població de més de 50 habitants, etcètera. És una oportunitat per evitar haver de tornar-nos a adonar que la iniciativa del mercat no arriba a l?equilibri territorial desitjat i haguem de ser proactius com ara amb la política de convenis entre la STSI i Telefònica, Vodafone i Orange per cobrir amb serveis en mobilitat tots els nuclis catalans de menys de 50 habitants abans de 2010 (i dur-hi també la TDT i la banda ampla). Cal diferenciar les obligacions en els entorns competitius i en les àrees més aïllades i definir compromisos concrets, alhora que se?ls premia per anar a nuclis de població poc rendibles amb mesures com ara redefinint en aquests entorns el cànon readioelèctric, afavorint la compartició d?infraestructures o fent realitat el concepte de roaming rural per tal que hagin d?usar les infraestructures existents en nuclis de menys de 200 habitants si no en disposen de pròpies i així, se?n beneficiï qui sí aposti per l?equilibri territorial. D?altra banda, i més en una societat Mediterrània amant dels entorns oberts i les relacions interpersonals presencials, els nous serveis en mobilitat són una oportunitat per passar d?un model productiu basat en la construcció a un model de més valor afegit. A la mobilització de l?oficina, l?oci, les xarxes socials, etc. Els nous serveis en mobilitat poden ser un factor de competitivitat important si els fem realitat aviat, si donem les facilitats als operadors implantats al nostre territori a oferir comercialment aquests serveis abans que la resta de les filials europees de les seves matrius, posicionant-nos com el territori on ser més avançats en els nous serveis, on poder provar-los al mercat i sent així, referents en el procés de concentració que s?està duent a nivell europeu entre els operadors i situant-nos con un mercat de referència. Recolzar els operadors del nostre territori en fer realitat els nous serveis és un bon encaix entre la millora de la competitivitat, el canvi de model productiu, i alhora els recolza en ser més forts als seus propis grups a nivell global, amb el que tothom hi guanya. Reordenar l?espectre no és solament assignar freqüències i fer calaix, és apostar per un desenvolupament econòmic i per un model de desenvolupament territorial. Ara tenim una bona oportunitat per demostrar el que som capaços o volem fer, fem-ho amb responsabilitat i siguem-ne dignes. Jordi Bosch i Garcia Secretari de Telecomunicacions i Societat de la Informació