En el sector de las telecomunicaciones submarinas no hay duda sobre la ubicación estratégica de la Península Ibérica y, especialmente, el Mediterráneo español está rompiendo con la hegemonía que hasta el momento habían tenido otros puntos como Marsella o Génova.
Barcelona ha sido quien ha sentado cátedra sobre cómo crear un hub tecnológico y ahora vemos como también Valencia se posiciona en el sector. Analizamos algunas de las claves coincidentes en ambos casos.
Puerta de conexión con África
Tanto Barcelona como Valencia son puntos de aterrizaje de cables submarinos de fibra óptica para conectar con África. En el caso de Valencia, el cable submarino Orval de 770 km, propiedad de Algerie Telecom y activo desde 2020, conecta la costa valenciana con Argelia (con puntos de aterrizaje en Algiers y Oran).
Respecto a Barcelona, hay que destacar que la estación de aterrizaje Barcelona Cable Landing Station (Barcelona CLS) es uno de los puntos de conexión del recorrido de 2Africa, el gran cable submarino de 45.000 km que bordea el continente africano para conectarlo con Europa y Asia. El cable, impulsado por un gran consorcio de empresas del que forma parte Meta, llegó a la costa catalana en 2022 y entrará en funcionamiento este año.
Atracción de inversiones de data centers
Barcelona junto con Madrid son las dos ciudades que concentran el mayor volumen de centros de datos de España, pero también Valencia empieza a despuntar. En este sentido, SpainDC (la Asociación de Data Centers de España) presentó recientemente un estudio sobre la Comunidad Valenciana en el que destacaba su potencial, teniendo en cuenta que ya cuenta con 9 data centers en la región (Nixval, Plexval, Parc Tecnologic, Isla Link, Digital Value, Pro Red y Exa, en Valencia; Abserver, Grupo Aire, en Alicante; y Walhalla en Castellón).
Por su parte, la solidez de Barcelona se traduce en un total de 13 centros de datos entre los ya operativos y los que están en desarrollo, según recoge el informe Colliers de 2023 sobre data centers. Merlin Properties, Equinix, Panattoni, Interxion, AQ Compute y Global Technical Realty son algunas de las empresas que están detrás de los principales proyectos en marcha.
En resumen, tanto Valencia como Barcelona cuentan con cables submarinos con proyección internacional y una presencia importante de data centers. Está por ver si Valencia se posicionará al nivel de Barcelona pero, sea como sea, esa competitividad será beneficiosa para el sector y para la conectividad de la región mediterránea.